sábado, 13 de noviembre de 2010

Capítulo 3 - De cómo Willy viaja, recibe visitas y se confiesa

Hallo!

Bueno, first of all quiero hacer la inauguración oficial del blog y hacer una breve introducción, presentación o llámese como se quiera. Por diversos motivos, los cuales procederé a citar más adelante, he decidido trasladar la narración de mis aventuras y desventuras, andanzas y expediciones, idas y venidas a este blog, puesto que (motivos):
-          Queda más bonito, más elegante y más completo, ya que puedo añadir fotos, vídeos, poner las letras en color, con un fondo, en fin todas esas chorradas que me gustan a mí, y que a pesar de que quizá resulte algo más aparatoso, supongo que al final al acostumbrarse uno, como con todo, sale ganando.
-          Otro punto a favor es que así está todo más ordenadito, junto, recopilado y si a alguien le apetece volver a leerlo (cosa que no creo) puede hacerlo con mayor facilidad.
-          Siempre me he considerado una persona muy complaciente, en la medida de lo posible, y a la cual le gusta escuchar y considerar a los demás, creo que es un buen método de aprendizaje; así que, a petición popular, este blog también “va por ustedes”.
-          Y la última razón, pero no menos importante por ello, ya que creo que fue el último empujón para decidirme a hacerlo, es la creación de otros blogs de dos compañeras, hermanas, amigas… llámese X, pero siempre partiendo de la belleza interior que tienen ambas. En fin, pues a causa de la creación de estos blogs, yo no quería permanecer impasible ante su creación, con lo cual quería comentar los textos que en ellos se encuentran, para lo cual era necesario crear un usuario a partir del cual también se podía crear un blog.
Por este cúmulo de razones, motivos o circunstancias, nace este blog, para estar un poco más cerca de vosotros e intentar tocaros, aunque sólo sea con palabras.
Bueno, dicho esto, como se diría por aquellas tierras de las que un día salí, “vamos a la chicha”.
No sé por dónde empezar realmente, porque es muy extraña la sensación que tengo, ya que se producen dos procesos o confluencias de pensamientos en mí: por un lado, entre semana, siento que los días pasan muy rápido, al estar ocupado con clases, cursos, etc. Pero la sensación interior, cuando me paro a pensar y llega el fin de semana, es de que realmente no ha pasado tanto tiempo, aunque sí que han sucedido muchas cosas en ese periodo de tiempo… será la sensación de vivir en dos sitios a la vez…
Desde la última vez que escribí contándoos un poco de mi nueva vida, han pasado muchas cosas como he dicho antes, muchas de ellas importantes, o al menos así las considero yo.
En el anterior mensaje os dije que ya tenía piso, pero aún no estaba viviendo en él. Ya sí. Un paso importante, tengo “mi” casa, un pequeño espacio donde habitar.
 Allá donde he ido siempre he necesitado sentirme a gusto en mi habitación, supongo que es porque es donde más tiempo paso, donde se condensan muchísimas cosas: sensaciones, vivencias, pensamientos, imágenes… por eso necesito decorarla, acondicionarla y llenarla con cosas que me aporten positividad, alegría, que me recuerden a buenos momentos… en definitiva, tener pedacitos repartidos por mi cuarto de aquella gente de uno y otro modo, forman parte de mí. A continuación os muestro algunas fotos de mi habitáculo, donde no sé si se podrá distinguir muy bien, pero aparece el gran “mural” que me he confeccionado con pequeños pedacitos de mi vida en que estabais vosotros. GRACIAS por hacerme feliz.



 En fin, como habréis notado hoy estoy menos “emoticono” y chistoso de lo normal, pero los que me conocéis sabéis también que soy así, como el tiempo unos días soleado y brillante, y otros nublado y gris, supongo que como todo el mundo.
 Pero hoy quiero deciros, sin el típico “os echo de menos” al despedir el mensaje, que DE VERDAD, realmente, se os echa muchísimo de menos y uno se da cuenta de cuan unido estaba y está, por supuesto, a algunas personitas…
 Bueno, melancolías aparte, voy a empezar ya a contar cosas más sustanciales, que siempre me extiendo un montón y si escribo es porque quiero que me leáis, pero si siempre escribo textos interminables es comprensible que no queráis hacerlo, con lo cual, intentaré ser más “consiso”.
 ¡Ya he recibido mi segunda visita!: Mi hermana y “mis sobrinos”. No, mi hermana no se ha quedado embarazada ni nada de eso, sino que la señorita se plantó aquí con Panchito y Gaia, con dos cojones. Se hizo el viaje en furgoneta y vinieron desde el norte de España, pasando y parando por Francia e Italia. Estuvieron aquí un par de días y a pesar de que el encuentro fue un poco agridulce, ya que Gaia se había perdido, me alegré muchísimo de verla y poder abrazarla. Finalmente ese latiguillo de color canela apareció, provocando la misma sensación que supongo tendrán los padres cuando un hijo se cae por estar jugando o haciendo el tonto, que al ver que está bien se alegra de que no pasara nada grave realmente, pero con ese tinte del “rencor” de habérselo hecho pasar mal en ese tiempo de incertidumbre.
 Me supo a poco su presencia por estas tierras, me hubiera gustado poder disfrutar más de ella, pero aunque supo a poco, supo intenso, ya que parecían (por la proximidad en fechas podría ser) los Reyes Magos, puesto que me trajo oro, líquido, eso sí, el aceite de la tierra que tantísimo se echaba de menos; la mirra fue sustituida por el tomate frito, ya que el de aquí no tiene nada que ver con el de allí; y por último el olor del incienso se convirtió en dulce olor de miel, ya que me dejaron un último regalo de una vela artesanal de jalea hecha por ellos.
 Fue una semana muy buena, la verdad, ya que vi a mucha gente querida, ya que tras la visita de mi hermana partí rumbo a Holanda. El viaje fue un poco “accidentado” debido a mis despistes y cuaje natural e intrínseco a mi persona… pensé que Frankfurt y Frankfurt Hahn eran el mismo lugar, pero hay una distancia de unos 100 y pico kilómetro, con lo cual al llegar al aeropuerto de Frankfurt Hahn, obviamente no pude coger el tren que tenía reservado desde Frankfurt. Pero finalmente conseguí llegar.
 No me quiero dejar en el tintero, que he de confesar que en un pequeño porcentaje me alegro de que esto ocurriera, porque así tuve la oportunidad de conocer a Miriam, la compañera de casa de Heli (una de las chicas finlandesas de aquí) que hizo el viaje desde Klagenfurt a Frankfurt Hahn conmigo, pero ella seguía su rumbo hacia Francia, al bautizo de su pequeño sobrino. Me ayudó a encontrar un plan alternativo para llegar a Utrecht y compartimos también una muy buena conversación, sobre nuestros planes futuros, nuestros pasos anteriores hasta llegar a Klagenfurt, sobre la sociedad actual y los niños y si realmente reciben la educación adecuada, sobre música… en fin, realmente sin duda alguna ha sido la vez que más me he alegrado de perder un tren y la más reconfortante.
 Finalmente, tras un largo día de viaje, llegué a Utrecht, donde me esperaba la persona que a día de hoy más feliz me ha hecho: David.
 Así, daba comienzo toda una semana, que al tocar a su fin, yo sentí que había sido solo un día. Comprobé una vez más lo puñetero que es el tiempo: lo rápido que pasa cuando no quieres que lo haga y lo lento que transcurre cuando estás deseando que pase.
 Fue una semana muy completa, emocionante, gratificante y sobre todo lucrativa, en el sentido más puro y blanco de la palabra, lucrativa para el alma, muy enriquecedora, sentí que en tan solo una semana había conseguido hacer todo un curso de “Estudios de la vida aplicados a las relaciones humanas”. También hice un máster en “Turismo y cultura holandesa”, quizás un poco breve, pero me alegro, porque me dejó con el gusanillo de querer conocer más, lo cual espero me acabe arrastrando a sucesivos viajes a una tierra que, carga emocional aparte, me encantó.
 A los dos días de estar en Utrecht, hicimos un viajecito a Amsterdam; fue un día completo, raro, bonito, tratando de asimilar, pero sin ser capaz de hacerlo.
 Allí estuvimos cenando en El sabor de María un curioso lugar en el que hacían comida Italiana, Portuguesa y Española. No es por desmerecer, pero la tortilla española, como en casa, en ningún sitio. Luego fuimos a ver un concierto de música clásica en el cual interpretaron Carmina Burana. Fue bastante impactante la verdad, además el lugar era precioso, un poco ostentoso quizá, pero muy bonito.


 Tras el concierto tenía una cita… mi primer reencuentro Erasmus por Europa…con mi pequeña “Chicharita”. No puedo explicar lo que sentí. Pero quiero repetirlo. Solo puedo decir eso. Fue una sensación tan plena, tan necesaria, tan increíble. Fue un abrazo con lágrimas, sonrisas, incredulidad, felicidad, añoranza y de triunfo. De triunfo en la lucha contra el tiempo y la distancia.
                                                      
Estuvimos compartiendo momentos de nuestras vidas, paseando por las calles de Amsterdam, tomando una cerveza, pero sobre todo, entre sonrisas imposibles de apagar al vernos después de tanto tiempo.
 El resto de la semana transcurrió en Utrecht, especialmente en un cuarto con una magia especial, impregnado de buenas sensaciones. Un refugio de las grises nubes que pudiera haber fuera, nubes metafóricas y reales; todavía viajo algunas veces mentalmente hasta allí en busca de consuelo y calor, cuando el frío alpino llega más allá de los huesos.
 El viaje de vuelta… fue duro, por aquello de las odiosas despedidas. Se me hizo especialmente largo, mi amigo el tiempo y yo… aunque he de confesar que en el avión sí que disfruté como un niño chico con las impresionantes vistas desde la ventana. Creo que jamás dejará de sorprenderme esa vista y jamás seré capaz de dejar de fantasear con poder “acostarme” en esas nubes en saltar desde ese avión y poder quedarme en esas nubes que tan cómodas y confortables parecen… pero de vuelta a la tierra, tocaba volver a la vida real.

 Tras algunas confesiones, comunicaciones con el mundo exterior, etc. Volví a casa a darme una ducha y declararle mi amor a la cama.
 El resto de la semana, transcurrió entre clases, reencuentros, comidas compartidas (he decidido que voy a añadir a mi lista de hobbies el cocinar para los demás, me encanta =)) y vuelta al ejercicio físico.
Ayer, viernes 12 de noviembre, fue el cumpleaños de Merce, para la cual organizamos una fiesta sorpresa de la que milagrosa y afortunadamente no sospechó nada. Fue un momento muy emocionante la preparación, cuando entró y nos vio a todos gritando “¡SURPRISE!” pero sobre todo, egoísta por mi parte, el momento en que recibí su abrazo, al igual que el resto claro. Me hizo muchísima ilusión, fue una sensación muy extraña. Supongo que disfruto con la felicidad ajena.
En fin, este pobre mortal se despide, eso sí, no sin antes añadir las debidas postdatas marca de la casa!

p.d.: ^^^^^^^^^^^^^^=)=)=) :D wiiii!! Jajajajaj meeeee!! Uuufffff! Plfkbnzkbndsl ^^=).Por todos los emoticonos reprimidos durante este texto, a fin de hacerlo parecer un poco más adulto y maduro.
p.d.2: a pesar de haberlo dicho anteriormente, y aún a riesgo de ser cansino y pesado, se osh echa muuuucho de menos!
p.d.3: por favor, en la foto de las increíbles vistas, obviad la publicidad de Ryanair. Ajjaja ¡jamás!
p.d.4: la bandera de España no es momento patriótico: os está esperando a que vengáis a firmarla, como la austríaca en la que tantas veces leo vuestros comentarios, que siempre consiguen arrancarme una sonrisa! ^^=)
p.d.5: portaos bien! Que los Reyes Magos ya están tomando nota! Sed felices, disfrutad de la vida y de la gente que tenéis cerca, y nada ya dejo de dar consejos paternalistas y hacer comentarios trascendentales! ¿De dónde venimos? ¿hacia dónde vamos? ¿Qué fue primero: el huevo o la gallina? Estos y otros muchos misterios los trataremos en el próximo capítulo… hasta entonces…

Reciban un cordial saludo, de su confidente y amigo:

Guillermo García Cuadra


QUÉ COÑOO!!! Jajajaja
Que un abrazo muuuuuy grande y muchos muchos besiños!!^^=) be happy!

Sincerely yours,


Willy Fog

2 comentarios:

  1. ¡¡¡Guilleeeeeee!!! Eres una de las mejores personas que conozco mi Guillermito! De verdad, es que se nota en todo lo que hace, e incluso en lo que escribes. Me encanta la tercera entrega de tus aventuras, sigue escribiendo tooodo lo que te pasa porque yo, al menos, aprendo mucho de este espíritu dual que eres tú, Guille.


    ¡Nosotros también te echamos mucho de menos! Mi cuarto de baño se siente triste por no recibir tu visita jejeje... Y Granada... bah! Granada no puede ni vivir desde que no te ve.

    Un besazo muuuy grande y un abrazo de oso! Que nos vemos dentro de muy pronto! MUAAAAAAAAAAAAK




    Por cierto, me encanta que hayas puesto la foto del dibujo del paint de los campineros XDDD Te quiero muchoooooooooooo :)

    ResponderEliminar